Por lo que ellas fueron, nosotras somos
Los maestros merecen ser honrados. Y las maestras. La periodista de Televisión Española Paloma del Río ya ha anunciado que los de Tokio serán sus últimos Juegos Olímpicos. Lo hizo en la presentación en el Museo Olímpico de Barcelona de su libro 'Más que olímpicas. Mujeres que dejaron huella en el deporte',pasaba escrito junto a Juan Manuel Surroca, que debería ser imprescindible para todas aquellas personas que amen el deporte y en el que cuentan la biografía de 77 deportistas. Muchas de ellas silenciadas por la historia, ninguneadas, y la mayoría sin el reconocimiento social que merecen aunque algunas ni siquiera ganaran una medalla. Pioneras, luchadoras, mujeres valientes, apasionadas y fascinantes que se atrevieron a romper barreras y despedazar estereotipos de género.
"Por lo que ellas fueron, nosotras somos", sentencia la periodista que vivirá sus decimoquintos Juegos, nueve de verano y seis de invierno, y que es la voz más reconocible y autorizada de la gimnasia rítmica y artística, la defensora de deportes minoritarios, la que tanto ha hecho no solamente por mostrar, sino por enseñar y educar a un país en disciplinas que no dominábamos por pura ignorancia. En los dos últimos Juegos ellas, las deportistas españolas, ganaron más que ellos (12 de 18 en Londres y 9 de 17 en Río) a pesar de soportar más dificultades y de tener menos visibilidad. Hablar de ellas, contar sus historias, es por lo tanto una cuestión de justicia para contribuir así a que la igualdad de derechos y de salarios sea algún día una realidad. Se ha evolucionado, sí, pero aún sigue siendo una asignatura pendiente de los medios de comunicación, como se empeña en recordarnos Paloma del Río.
Una empieza a soñar, a desear, aquello que ve. Y muchas periodistas deportivas hemos tenido a Paloma del Río como referente de lo que queríamos llegar a ser. Este verano nos regalará sus últimas lecciones en unos Juegos Olímpicos y no debemos olvidar que por lo que ella ha sido y es, nosotras somos.