Nunca hubo un ciclista como Ayuso
Juan Ayuso ganó ayer la etapa reina en Lago di Campo Moro y consolidó la maglia rosa en el Giro de Italia Sub-23, en otros tiempos conocido como Baby Giro, Girobio o Girino. En su palmarés figuran algunos de los grandes campeones italianos de siempre: Pantani, Moser, Battaglin, Simoni, Baronchelli, Di Luca, Casagrande… Y otros internacionales: Ugrumov, Konyshev, Betancur... Su último vencedor fue Pidcock, que esta temporada destaca en el Ineos. El ciclista de Jávea está a punto de integrar ese prestigioso historial, aunque hay una diferencia de peso con sus ilustres predecesores: Ayuso tiene 18 años y compite en categoría Sub-23, en algunos casos ante corredores cinco años mayores. Ese desfase no le ha amilanado, todo lo contrario. Ya suma ocho victorias en el presente curso, tres de ellas en el Girino. A falta de tres jornadas dispone de una ventaja de 2:53 minutos, que podría haber sido incluso más elevada si no hubiera corrido la contrarreloj con el sillín bajado “cuatro tallas menos” por una avería. Aun así salvó el lance con una pérdida mínima de 32 segundos. Un fenómeno.
Ayuso es un portento. Así lo detectó Josean Fernández Matxin, buen ojeador de talentos, que le echó rápido el guante y le fichó para el UAE Team, donde debutará al final de la actual campaña. Antes del salto está corriendo cedido en el Colpack con el conocido rendimiento. Ayuso compartirá maillot con Pogacar, otro joven valor ya confirmado, vigente ganador del Tour. Un referente. Nunca ha habido un ciclista español tan prometedor a su edad. Si acaso Miguel Morrás, campeón mundial juvenil, que vio truncada su carrera por una lesión de rodilla. Los corredores españoles solían ser de lenta maduración, aunque bien es cierto que el ciclismo actual ha cambiado los plazos del profesionalismo y ya no es tan extraño debutar a los 18 años. Evenepoel es un ejemplo. Y Ayuso sigue ese camino.