Klopp no repetirá la apuesta

Fin de la pesadilla en Anfield. Justo antes de recibir al Real Madrid, el Liverpool volvió a ganar por fin en casa tras una histórica racha de seis derrotas consecutivas en la Premier y de ocho encuentros sin ganar en su feudo. Cuando Ollie Watkins adelantó al Aston Villa en el primer tiempo la séptima debacle seguida se vio cerca, pero los tantos de Mohamed Salah y Trent Alexander-Arnold (este último, que fue un golazo, llegó en el 91’) le dieron una victoria muy necesaria al cuadro de Jürgen Klopp. Los reds han sumado los últimos nueve puntos posibles y han reducido su desventaja con respecto a la cuarta plaza: ahora la ocupa el West Ham y la tienen a solo tres unidades.

A vueltas con Thiago. La decisión de Klopp más criticada por la prensa inglesa en el partido de ida fue su apuesta por Naby Keita en detrimento de Thiago Alcántara. El propio entrenador pareció asumir su error corrigiéndolo con la sustitución inversa justo antes del descanso. Sin embargo, ante el Aston Villa volvió a dejar al centrocampista español en el banquillo y le dio la titularidad a James Milner junto a los fijos Fabinho y Georginio Wijnaldum. Fue una de las pocas rotaciones que el entrenador alemán hizo frente al cuadro de Birmingham, ya que repitieron nueve de los once que salieron de inicio en Valdebebas. La otra novedad fue la titularidad de Roberto Firmino, que desplazó a Diogo Jota a la izquierda en un movimiento propiciado por la suplencia de Sadio Mané. Asumiendo que la estrategia de buscar un plan más físico no le funcionó, lo más probable es que Klopp esta vez sí apueste por Thiago desde el principio ante el Real Madrid para intentar competir por la posesión y disponer de este modo de un pasador más talentoso en la medular.

¿Los cuatro juntos? Quizá no desde el arranque, pero viéndose con la obligación de remontar no sería descartable que Klopp se planteara en algún momento del partido juntar a sus cuatro atacantes y renunciar a un centrocampista. En ese esquema 4-2-3-1, que ya se vio en el tramo final ante el Arsenal hace diez días, Firmino suele retrasarse a la media punta para actuar unos metros por detrás de Diogo Jota, con Mané y Salah abiertos a los costados. Incluso el suizo Shaqiri, que posee un golpeo de balón formidable desde media distancia, podría ser una alternativa a la desesperada en los últimos minutos.

La defensa no se toca. Pese a la inseguridad que mostraron en la ida, que se podía adivinar de antemano por su escasa experiencia internacional, Klopp parece dispuesto a seguir dando continuidad a la pareja de centrales formada por Nathaniel Phillips (24 años) y el turco Ozan Kabak (21). Al menos los mantuvo ante el Villa, en lo que pareció un mensaje de confianza y una apuesta por otorgarles noventa minutos más con el objetivo de que siguieran afianzándose y compenetrándose. El técnico germánico ha llegado a esta conclusión tras comprobar cómo la búsqueda continua de nuevas parejas con constantes cambios no le dio en ningún momento el resultado esperado. Sin embargo, esta zona seguirá siendo para el Madrid un punto débil a explotar.