Dos caminos distintos para el Madrid

En el reportaje que da pie a esta columna, Mario de la Riva emplea una palabra clave: paradójico. Y el término paradoja, según la RAE, nos remite a un "hecho o expresión aparentemente contrarios a la lógica". Visto así, un Real Madrid sin balón sería como un Congreso de los Diputados en paz y armonía o un niño sin charco. Quiso el fútbol que este mismo sábado el Cádiz tumbara al Barça con apenas un 18% de posesión. Lo explicaba Álvaro Cervera como un libro abierto: "Hay jugadores que necesitan la posesión para ganar, nosotros no. La posesión, en muchas ocasiones, nos trae un problema". Es decir, que el balón hay que tocarlo y tocarlo si uno sabe qué hacer con él. Si no, es mejor regalárselo al rival. Con lacito.

Lo del Sánchez Pizjuán fue la excepción a la regla, pues los blancos son terceros en posesión (57,95%) en la LaLiga. Con las gafas de la Champions veríamos un panorama similar. ¿Cuál es el equipo con más balón en sus botas? Lo han adivinado, el City de Guardiola (63,26%), seguido de Barça (63,13), Real Madrid (60,20), Sevilla (59,71), Dortmund (59,48) y Bayern (59,09). "Si tú tienes el balón, el rival no lo tiene", decía Cruyff. "La posesión de balón no significa nada", afirmó Beckenbauer cuando tenía a Pep en su Bayern. Está claro que el fútbol es un lugar al que puede llegarse por caminos distintos. ¿Recuerdan a Bilardo y Menotti?