¿Hamilton es mejor que Schumacher?

Octubre de 2020 es un mes deportivo de leyenda. Rafa Nadal igualó a Roger Federer con 20 títulos de Grand Slam. Los Lakers de LeBron James empataron los 17 anillos de los Celtics. Y Lewis Hamilton ha batido otro récord de Michael Schumacher con su 92ª victoria en un gran premio el domingo en Portimao. No es la primera marca del mito alemán que el piloto británico borra en la presente temporada. En julio, en Hungría, ya superó sus 89 poles, que de momento ha colocado en 97. Y en agosto, en Montmeló, rebasó los 155 podios del Kaiser, que ya ha situado en 161. Vuelta a vuelta, Hamilton está pulverizando los registros del más laureados de la Fórmula 1, con el premio gordo asomando al final del Mundial. Dentro de cinco grandes premios, allá por diciembre, o quizá antes, Hamilton alcanzará las siete coronas ganadas por Schumacher. Los datos históricos alientan el inevitable debate. ¿Nadal o Federer? ¿LeBron o Jordan? ¿Hamilton o Schumacher? A los que algunos añaden a Laver, Abdul-Jabbar o Senna. La búsqueda del más grande es un aliciente del deporte.

Las frías estadísticas son un buen soporte para la caliente discusión. Con ellas, Hamilton es el mejor de la F1. Y seguirá creciendo. En cualquier caso, las comparaciones entre épocas siempre son engañosas, porque el envoltorio es diferente: los rivales, los circuitos, la tecnología, la preparación… En los deportes de motor, además, se agrega otro factor. Si uno cae en un gran volante en el momento adecuado, ya tiene mucho avanzado. En este sentido, ni Michael ni Lewis han ido descalzos. Aunque tener un coche superior también es un arma de doble filo, porque impide evaluar al piloto en todos sus méritos. Le está pasando a Hamilton, de quien damos por supuesto su dominio porque conduce un Mercedes, y luego resulta que le saca 25 segundos a su compañero Bottas. Por algo será.