Menos quilates, más motivación

Pocos esperaban un comportamiento tan redondo de Kirolbet Baskonia en la reanudación de la liga ACB en Valencia. Los de Dusko Ivanovic, que llegó a Vitoria el día de Navidad sustituyendo a su compañero de la Jugoplastika de Split Velimir Perasovic, no habían realizado una buena temporada hasta el inicio de la epidemia del coronavirus. Deambulaban por la ACB y sufrían mucho en la Euroliga.

Pero la puesta en marcha de la competición ha sido espectacular y, físicamente, han demostrado estar un punto por encima de los demás equipos. Han ganado al Bilbao Basket, Tenerife, Unicaja y Valencia y han tropezado con el Barcelona y la Penya (ese día Ivanovic jugó con muchos jóvenes como Sedekerskis o Kurucs). En todos los choques han demostrado fases con defensas fuertes, anticipación en líneas de pase y capacidad de robos de balón. También son muy fiables en el rebote. La calidad para anotar, a estos niveles, se presupone.

Antes de comenzar la semifinal ante el Valencia, los vitorianos promediaban 76 puntos en contra. Enfrente estaba el conjunto más anotador, con una impresionante media de 92 por partido. Al final del choque, 73-75. O sea, en el territorio de Ivanovic, no en el de Ponsarnau. El conjunto vasco ha perdido por el camino a Christon (en Estados Unidos alucinando), Garino (saliendo de una rotura de cruzado mientras vende empanadas argentinas en su restaurante) y Fall (distensión en la fascia de su pie). Pero ha recuperado a Vildoza y a Granger a tiempo para jugarse las castañas con el Barcelona.

Un día destaca Vildoza (Bilbao), otro Shengelia (Tenerife), también Shields (Barcelona), Polonara (Unicaja) o Dragic (Valencia). Resulta complicado centrarse tan sólo en una presa porque te pueden degollar por el sitio menos esperado. Se trata de un bloque versátil e imprevisible. Eso sí, el que se relaje, se marcha inmediatamente al banquillo. Todavía resuena la bronca de Ivanovic a Shengelia el día del Unicaja porque no le hacía caso en el tiempo muerto y le recriminaba no dar en el parqué lo que demandaba en el banco. Galones de capitán pero, claro, Ivanovic es capitán-general y está a punto de ser renovado mientras que el georgiano apunta al CSKA de Moscú.

Viejos conocidos en el roster de enfrente: Hanga, Pau Ribas, Heurtel ya saben lo que es ponerse la otra camiseta azulgrana, la de la capital alavesa. Ivanovic versus Pesic, dos talentos balcánicos con fundamentos similares pero no simétricos. Dusko llevará el choque al terreno físico, al de la intensidad y el compromiso. Tiene una plantilla de menos quilates pero la motivación es enorme. Baskonia busca su cuarta liga en la historia y piensa que está en condiciones de dar la sorpresa en la Fuente de San Luis.