A Zidane le valen dos de tres
Si hay algún tipo en el mundo que no se pone nervioso ante Clásicos como el de mañana, ese es el técnico francés. Zizou parte con la ventaja de saber que a su equipo le valen dos de los tres resultados en juego y por eso quiere empezar la casa por los cimientos. Mendy para frenar las arrancadas de Messi y cuatro centrocampistas en el medio con el descansado Casemiro como antídoto principal para frenar la circulación de balón de los centrocampistas del Barca. Es verdad que la baja de Hazard deja sin su mejor socio a Benzema, pero Bale lleva mes y medio pensando en este partido como su última gran oportunidad de redimirse ante el madridismo y estará deseando reivindicarse.
Zidane ha logrado que su equipo llegue al Camp Nou en el mejor momento de la temporada y eso ha puesto de los nervios a Busquets y compañía, que han empezado el partido disparando contra el estamento arbitral. Mientras el plan azulgrana parece haberse reducido a confiar en la inspiración de Messi y rajar del VAR, el entrenador blanco ha logrado llegar al primer gran envite del año con un plan preparado al milímetro para poder pegar un puñetazo en la mesa en el mejor de los escenarios. Ante los análisis más simplistas-envidiosos que siguen hablando de flor, Zidane continúa con la receta que le ha hecho ganarlo todo: trabajo, sentido común y poco ego.