El Espanyol se mete mar adentro

El barco perico. La salvación se aleja como un barco que se adentra en alta mar de la orilla, ya sea por la mala racha en el RCDE Stadium o por la fragilidad de un Espanyol desgraciado, maltratado además por el VAR en una primera parte digna en el Wanda. Pablo Machín, el nuevo timonel, acumula una victoria y cuatro derrotas en LaLiga (tres de 15 puntos), lo que denota que los problemas del equipo son más estructurales y de calidad, por mucho que la imagen sea mejor que la de las primeras jornadas y haya intención en el juego. Pero cuando el Atlético aceleró el Espanyol fue un flan. Ferreyra no tocó un balón dentro del área y el fichaje más caro (Vargas) es suplente. Evitar la deriva requerirá tiempo y una inversión en enero.

El 1-1. El Atlético cedió la iniciativa al Espanyol, pero dio más sensación de peligro recuperando balones en campo rival, un ejemplo de que puede dominar el juego el que no tiene el balón. Una cosa es el dominio de la posesión y otra el dominio posicional, como demostró también el Espanyol en el 1-0. Víctor Sánchez, ladrón de balones, le ganó la partida a Koke con intuición y encontró a Darder, cuyo latigazo fue de videojuego. El equipo de Machín hizo lo más díficil, adelantarse a Simeone y a sus guerreros. Por eso el 1-1 fue tan determinante. Ante la duda, la decisión se toma en contra del Espanyol, desgraciado como en la segunda mitad cuando David López marcó de cabeza un saque de Darder pero el colegiado señaló antes una falta de Bernardo a Koke también discutible. Siempre llueve en el mismo lugar, como en San Mamés se le anuló al colombiano un gol dudoso.

La izquierda. Fue curiosa la alineación de Machín, con dos laterales izquierdos en el banquillo (Dídac y Pedrosa) y Javi López de titular en ese costado. Jugar a pierna natural es un detalle clave, como le pasó a Víctor Gómez en la segunda mitad cuando en la izquierda no estuvo bien perfilado y perdió el balón que propició el 3-1. Cualquiera hubiera firmado salir con un punto del Wanda, pero el Espanyol dio sensación de previsibilidad y muchos de sus jugadores están muy por debajo de su nivel. Y ya han transcurrido 13 jornadas del campeonato.

Los líderes. Con margen de mejora (ganar a Getafe y Osasuna en el RCDE Stadium ahora se antoja innegociable), el Espanyol puede acusar la falta de líderes por diversas circunstancias. Diego López acaba contrato, como Javi López o Naldo, mientras que Calleri, Ferreyra o Bernardo están cedidos. Marc Roca tuvo un pie este verano en el Bayer de Munich, mientras que Adri Pedrosa también es un jugador con mercado. El club sabe que futbolistas como Vargas o Calero se han fichado para que se revaloricen y poder hacer caja. Más que nunca, el equipo necesitará recuperar ese espíritu comprometido que ha hecho salvarse siempre.