España se borra de Europa

Los Campeonatos de Europa de ciclismo en ruta arrancaron este miércoles en Alkmaar (Holanda) con un relevo mixto, sin representación española, y acabarán el domingo con la carrera de fondo profesional, con la misma ausencia. España sí participará en el resto de categorías con 27 ciclistas, pero se ha borrado de la cita estelar al no poder reunir un equipo de garantías. El argumento de la Federación es la carga de calendario. Unos venían de correr el día antes en Polonia, otros tenían que hacerlo el día o dos días después en el Binckbank o en Burgos, otros compiten en Portugal… Si a estos unimos los que están cansados del Tour y los que sólo miran a la Vuelta, Pascual Momparler se ha encontrado con los únicos síes de Herrada y Lobato. Para colmo, Castroviejo también renunció a la contrarreloj, donde fue oro en 2016.

Sin dudar de los esfuerzos y de la voluntad que haya puesto el nuevo seleccionador, el resultado es que una potencia mundial como España se queda fuera de la prueba reina de los Europeos, una carrera que en sus tres ediciones de existencia ha inscrito nombres de primerísima fila: Sagan, Kristoff y Trentin. Y eso es un cante para nuestro ciclismo, además de una mala imagen exterior. Como tantas veces pasa en otros deportes (tenis, baloncesto…), los protagonistas han preferido dar prioridad a sus intereses particulares. El próximo verano habrá tortas para acudir a los Juegos Olímpicos, pero los Europeos todavía no han arraigado y el pelotón español no le otorga valor. Otra cuestión es que la fecha tampoco acompaña mucho. En 2020 cambiará y se celebrará después de la Vuelta: quizá sea una buena solución.