San Emeterio fue el pegamento de la medular del Granada
Fede San Emeterio, presentado hoy por el Real Valladolid, ha sido un pilar fundamental del ascenso del Granada. Diego Martínez confió en él ciegamente desde el inicio de la temporada y cada vez que no ha podido estar, el Granada no ha notado. Fede ha sido el pegamento de la medular. Un jugador capaz de estar en todos lados. Su tarea ha sido, sobre todo, defensiva, haciendo de pivote junto a Montoro. El santanderino se encargaba de destruir todo lo que pasase por la medular y su trabajo se refleja en los números. Por algo el conjunto nazarí ha sido el equipo menos goleado del campeonato. Pero, cuando le tocaba sacar el balón, lo ha hecho siempre con criterio y buscando la mejor opción. Quizá la construcción no sea su mayor fuerte, pero sabe qué hacer con el balón cuando le toca moverlo.
Diego Martínez ya conocía a Fede del Sevilla Atlético y ha sabido sacarle un gran partido. Lo ha jugado prácticamente todo. En total, 36 partidos, 34 de ellos como titular y la mayoría de los que no ha jugado ha sido o bien por lesión o por sanción. Marcó dos goles, ambos para dar puntos contra Tenerife y Mallorca, y ha visto dos rojas. Ha sido una temporada en la que ha ido de menos a más. Su trabajo es encomiable. Un jugador completo para la medular que, al fin, podrá dar el salto a Primera División tras tres temporadas siendo importante en Segunda. Fede hace el trabajo sucio del equipo, lucha cada balón, aunque quizá peca de falta de experiencia. A sus 22 años es una apuesta segura, pero necesita continuidad para encontrar su mejor versión y alguien cerca que pueda crear el juego del equipo. En Granada ha encontrado la estabilidad como lo hizo en Sevilla. Siempre ha rendido bien con Martínez, ahora habrá que ver si se adapta a otro entrenador y otra forma de jugar. El Granada ha perdido uno de sus baluartes.