Coutinho puede cambiar los planes de Valverde
Estructura del Barça. El hecho de que Coutinho llegue justo al partido puede hacer variar los planes de Valverde en cuanto a la estructura o el sistema a emplear. Si decide arriesgar y apostar por el brasileño como titular junto a Messi y Malcom podrá utilizar el 1-4-3-3 que, a mi parecer, puede plantear más dificultades al 1-4-4-2 del Valencia que si finalmente tiene que jugar con cuatro centrocampistas, seguramente en rombo, ya que una de las fortalezas de los de Marcelino es proteger los pasillos interiores. El hecho de jugar con extremos, puede facilitar al Barcelona proporcionar amplitud al juego y hacer partícipes a los laterales, atacando la zona más vulnerable del sistema valencianista, los costados.
Encontrar los espacios. Espero un Valencia en bloque medio-bajo, defendiendo en pocos metros, con equipo corto y con la línea defensiva a unos diez metros por delante del área, distancia en la que se sienten muy cómodos y seguros. El primer objetivo del Barça será encontrar a Busquets por detrás de los dos delanteros, que no se suelen escalonar en la presión, manteniéndose casi a la misma altura. Los laterales blaugrana cogerán mucha altura, como sucede habitualmente, y uno de los interiores buscará lateralizarse a un costado u otro de los centrales para obtener una primera ventaja en el juego para, o poder atacar la siguiente linea che o atraer a alguno de esos centrocampistas para encontrar pase hacia Busquets y que éste pueda girar el plano del juego. La siguiente situación del juego que interesa y buscará el Barcelona será un constante 3vs2 en las bandas. El extremo, el interior y el lateral contra el extremo y lateral valencianista, incidiendo en la banda que defienda Guedes, que no siempre acude raudo para ayudar a Gayà. De todos modos, al Valencia no le importa liberar los costados ya que, como he dicho anteriormente, se sienten cómodos en la defensa del área, por eso priorizan tapar por dentro.
Contraataque che. La clave ofensiva para los de Marcelino será la eficacia de sus transiciones. Para tener éxito, dos claves: la cantidad de veces que provoques el error en el pase rival y la zona en la que consigues hacerlo. Lo ideal es no pasar demasiado tiempo cerca de Jaume. Dentro de los ricos matices que aporta el técnico asturiano a su ataque vertical, dos grandes diferencias en función de la zona de recuperación. Si recuperas en una zona muy lateralizada, el movimiento de los puntas es el siguiente: el delantero cercano se acerca al balón para arrastrar a su marca, mientras el lejano ataca el espacio generado anteriormente por su compañero. Si la recuperación es en una zona más centrada, el primer pase siempre es en diagonal buscando al delantero más alejado, que busca una descarga a uno de los centrocampistas y montar un ataque en transición.