Mientras escribo estas líneas estoy a las puertas del CUF Porto, el hospital donde Iker Casillas se recupera de un infarto de miocardio agudo. Iker Casillas es un hombre con suerte, con mucha suerte y para ejemplo el último acontecimiento de su vida. En el Madrid ganó todo, con él fuimos campeones del Mundo, él es imagen España y él ha ganado hace unas horas el partido de la vida.

No para de repiquetearme en mi cabeza esa frase de Xavi Hernández: "Cuando todo está perdido siempre aparece Casillas". Pues sí ayer hizo la mejor parada de su vida a un infarto que venía directo a por él. Nelson Puga, médico del Oporto, fue su asistente perfecto en este partido inesperado y por sorpresa.

Ahora la palabra más utilizada es tranquilidad. En la vida de Iker poco o nada importa que pasa mañana o dentro unos meses. No han hablado del mañana, hablan del hoy y de la felicidad de estar. Hoy su vida no va mas allá de su mujer, sus hijos, su recuperación y su 38 cumpleaños el 20 de mayo. Sí, Iker es un tipo con suerte pero cuánta suerte y alegrías ha traído él a nuestras vidas. Por eso y por mucho más tenía que ganar este partido...