La llegada de Hazard al Madrid y la necesaria reconversión de Vinicius

El nombre de la ilusión. Tras el pasado Mundial de Rusia, Eden Hazard hizo todos los esfuerzos para formar parte del Real Madrid. Roberto Martínez, su seleccionador, o Courtois deslizaban su enorme deseo de jugar en el triple campeón de Europa y Lopetegui bendijo aquella posibilidad, pero Florentino estaba en modo demostrarle al mundo que el Madrid sería igual de grande sin Zidane ni Cristiano Ronaldo. Ahora, con la temporada tirada por la borda y el Bernabéu semivacío, el belga pone nombre a una primera ilusión. Estamos hablando de un jugador superlativo, pero su llegada podría tener algunas derivaciones.

Su mejor posición. Guille Uzquiano siempre defiende que la mejor posición de Hazard sería jugando como mediapunta con dos atacantes por delante. Isco también ha mostrado su mejor versión en ese vértice superior del rombo. La realidad es que, tanto con Conte como con Sarri, el belga ha jugado en el flanco izquierdo, en la línea de tres, desbordando de fuera hacia dentro y con una enorme claridad de cara a la portería contraria. Precisamente, la asignatura pendiente de Vinicius, cuya eclosión es un hecho, pero, a pesar de su gran velocidad y desborde, carece de esa calidad en la suerte final. Lo ideal para que convivan es que Vinicius juegue por la banda derecha y aprovechase su facilidad para llegar a la línea de fondo. De esta manera, sería compatible no sólo con el mejor perfil de Hazard en el Madrid sino también con el de Neymar en la selección brasileña.

El enigma Asensio. Ante este panorama de posibles llegadas, habrá jugadores internacionales como Marco Asensio, Isco o Lucas Vázquez que deberán asumir su nueva situación en el club blanco o pedir pista al club para dejar un buen dinero en las arcas madridistas y buscar minutos en algún otro grande del panorama europeo. Asensio es el caso paradigmático de un talento descomunal que no ha encontrado la confianza ni ha mostrado la personalidad, que ha tenido Benzema por ejemplo, para desplegar su indiscutible repertorio. Con Hazard, Vinicius, Benzema y se supone que otro delantero, jugar partidos relevantes va a estar muy caro. Dos años de intrascendencia no se los puede permitir el gran zurdo mallorquín.

La salida de Bale. Para reforzarse bien, el Madrid va a tener que aligerar peso y el que más cobra es el galés. Tiene mercado en la Premier, pero también tiene un sueldo muy elevado. Estigmatizado por el Bernabéu, las conversaciones con su agente, Jonathan Barnett, ya han comenzado. Como casi siempre, los hechos serán más elocuentes que las palabras.