Rodrigo: pilar de la nueva era

Siempre tendré la duda de qué hubiera sido de España en el último Mundial si Rodrigo Moreno hubiese jugado más que los últimos 17 minutos de la prórroga contra Rusia. Pero ese partido no volverá. Rodrigo, que era hombre de confianza de Julen Lopetegui, de ahí que estuviera en las quinielas del Real Madrid el pasado verano, es ahora el ‘9’ de España desde la llegada de Luis Enrique. El valencianista es el único que ha participado en los siete partidos del asturiano como seleccionador (de 45 futbolistas a los que éste ha convocado), respondiéndole ayer Rodrigo a tal confianza con su tercer gol con España bajo su tutela (su quinto como internacional en 16 partidos) y noveno gol en lo que llevamos de 2019.

Rodrigo, recién cumplidos los 28 años, llega a esta nueva era de La Roja en plenitud de facultades físicas y mentales. En el Valencia ha crecido como persona a las duras y como líder a las maduras. Su aportación al juego colectivo va mucho más allá de su acierto en el área. De hecho ese no es su fuerte ni tampoco su único cometido. Sus virtudes van más allá del gol; es su toque en velocidad, su aportación en la transición defensa-ataque y su sentido para la asociación. Marcelino dio con la tecla que no le encontraban por Mestalla y Luis Enrique parece estar dispuesto a darle los galones que en La Roja no ha tenido. Y Rodrigo es un tipo agradecido y siempre comprometido.