Genética y un buen trabajo
Los hermanos noruegos Ingebrigtsen y, sobre todo el menor, Jakob, bicampeón de Europa al aire libre de 1.500 y 5.000, se han convertido en el tema de conversación principal dentro del mundo del atletismo. Tras batir al recién plusmarquista mundial indoor de 1.500, el etíope Samuel Tefera, en Dusseldorf, parte como favorito en los Europeos bajo techo de Glasgow. Será una lucha apasionante en la que se enfrentará principalmente a su hermano Filip y al polaco Marcin Lewandowski en 1.500. También correrá los 3.000.
Este chico, que se pasó parte de su infancia practicando esquí de fondo y jugando al fútbol, fue testado desde muy pequeño por el fisiólogo Leif Inge Tjelta en su laboratorio. Sus niveles de VO2max eran tan elevados que dentro de su familia se sabía quién iba a ser el mejor de los tres hermanos muy pronto. Además, utiliza la metodología de entrenamiento basada en la medición in situ de concentración de lactato sanguíneo. Por tanto, ¿a qué se debe este nivel de rendimiento tan excelente? ¿A la genética o al entrenamiento? Es otro ejemplo más de que el rendimiento tiene un carácter multifactorial.
Arturo Casado fue campeón de Europa de 1.500.