Un disgusto para las federaciones

El CSD ha citado este viernes a las 10:00 a las federaciones para facilitarles el borrador de la nueva Ley del Deporte que este mismo día se presentará al Consejo de Ministros para su toma en consideración. Un momento anhelado por las propias federaciones, que reclamaban desde hace tiempo un texto que atendiera a las actuales necesidades y acabara con la obsoleta ley de 1990. El anterior Gobierno lanzó los debates, que avanzaron con cierto consenso político, aunque ha sido el actual quien se ha arremangado para redactar el articulado en un intensivo trabajo. Mientras llegaba la deseada fecha se fueron conociendo varias pinceladas: el deporte femenino, el inclusivo, el profesionalismo... Pero nada transcendió de unos artículos que han aparecido a última hora para borrar la sonrisa de las esperanzadas federaciones.

Este borrador, que ha cambiado respecto al que circulaba hace un mes, impide a las ligas profesionales que puedan “adquirir, explotar o comercializar” los derechos de competiciones de otros deportes. Una clara ley anti-Tebas, que a través de LaLiga aporta tres millones de euros a las federaciones a cambio de sus derechos de retransmisión televisiva. El Gobierno quiere frenar que una liga privada se haga progresivamente con el deporte español. En los últimos dos años, As ha celebrado comidas informativas con 33 federaciones, más de la mitad, y todas se han mostrado agradecidas a esa ayuda económica que les llega del fútbol, y que en muchos casos sirvieron para mantenerse a flote en tiempos de dura crisis. Son esas mismas federaciones que lamentan ahora no haber sido más consultadas para la nueva ley.