En el Atleti tiene que jugar quien se lo gana. Godín merece un esfuerzo. Ha sido pilar de mucho. Como Juanfran, Filipe. Porque ese escudo del oso y el madroño representa a muchas personas. Y ellos saben. "Quiero jugadores que quieran quedarse, no que se queden", que decía Torres, y no puede haber más verdad. Ahí está la puerta para que vayan los que quieran. Los que no entienden de este compromiso y este escudo al corazón. Hasta luego Lucas, y 80 millones (aunque mejor en junio, por favor). Bye, bye Thomas si algo te hace infeliz. Otros vendrán, otros que se merezcan el escudo.

Hace días se despedía a Gabi. Él sabe. Él siente. Él merece. Él será inolvidable. Como Godín, Juanfran y Filipe pase lo que pase en sus contratos desde hoy. Y ojalá el club cambie el criterio para entregar placas en el Paseo de Leyendas a jugadores del siglo XXI porque Adelardo, Collar, Luis o Torres no merecen estar cerca de desagradecidos. Que el Atleti es otra cosa. Que si lo han vivido y no lo entienden no tienen sitio. El escudo siempre estará por encima de los jugadores. Y cómo lleven la camiseta será lo que les haga eternos. Que no se quiere a quien no quiera. Que esto es sentimiento, y no se quiere a quien no sienta. Futre podría explicarlo. Aún se canta su nombre en la grada. O Ujfalusi. O Luis, si viviera. Eso es para siempre. El dinero no.