Él quiere que le llamen Rodrigo, pero, como dijo Luis Enrique el día que dio la última lista, para él es Rodri (y para todos, al menos en la Selección) porque Rodrigo es el delantero del Valencia. Rodri es el medio del Atlético de Madrid, ese futbolista que parece fichado por el conjunto colchonero para cambiar su estilo. Pero solo lo parece. Porque Simeone ha dejado muy clarito que no cambiará su forma de jugar por más pesados que nos pongamos los españolitos enamorados del tique taca que nos hizo ser campeones con Luis y Del Bosque. Aunque al Cholo no se le pide tiqui taca en su Atleti, pero eso es para otro artículo.

Rodri se ganó el sitio ante Bosnia, que fue una prueba más de que la Liga de Naciones es buena para evitar amistosos como el de anoche que no tienen ningún interés. Los debuts de Mario Hermoso, Brais Méndez, Pablo Fornals y Pau López demuestran que la renovación está en marcha. El seleccionador tiene que hacer un nuevo bloque de cara a la clasificación de la Eurocopa. Es necesaria esta savia nueva. Con Rodri y Ceballos liderando el juego. España está lista para la reconversión. Adelante, Luis Enrique.