La parrilla de salida, una mera foto

Llegó una de las etapas marcadas en rojo en el calendario de este Tour. Empezando por la salida, cual parrilla de Fórmula 1. Una foto que quedará para el recuerdo por la novedad, pero lo lógico es que se reagrupen los equipos en esta jornada de tanta dureza concentrada en tan pocos kilómetros. Eso en el caso de Sky, al que aún no le han metido en ningún aprieto. Parece que el resto de equipos le tienen miedo, y antes o después tendrán que actuar. Uno de ellos es Movistar, del cual esperaba más movimiento. Lo mismo pasa con los grandes aspirantes al cajón de París. Si quieren alcanzarlo tienen que actuar ya, y hasta la etapa del martes, decepcionante en cuanto a movimientos en la general, no se ha visto ninguna declaración de intenciones por parte de nadie.

Llega el momento de esos corredores. Es ahora o nunca para ellos y tienen una gran oportunidad en esta novedosa jornada. La historia puede cambiar, y con ella su planteamiento. Diferente y agresivo, no como hasta ahora. Han de actuar desde el principio o en el ascenso al segundo puerto. No pueden esperar mucho para atacar si quieren bailar en la clasificación general  y conseguir diferencias antes de cruzar la meta. La del miércoles será una de las últimas oportunidades, junto con la etapa del viernes, para escaladores como Mikel Landa, Romain Bardet o Nairo Quintana. Les cuesta mucho defenderse en la crono, tal y como han demostrado. Todo lo contrario que Chris Froome, Geraint Thomas, Primož Roglic o Tom Dumoulin. Estos cuatro gozan de esa vida extra, pero a pesar de ello todo puede cambiar en una etapa tan imprevisible como esta, siempre y cuando los equipos y los favoritos rompan la barrera del miedo generada por el Sky.