Rudy, un MVP ejemplar

Rudy ha pasado un calvario con su espalda en los dos últimos años. No abrió la boca, recibió muchas críticas por su elevado salario y se limitó a trabajar como si no hubiera mañana para recuperarse. Y lo ha hecho a lo grande, siendo uno de los hombres clave en la conquista de la Décima en Belgrado y poniéndose el disfraz-NBA de Stephen Curry con una exhibición pletórica en la final ante los vitorianos. ¡MVP de la final de la ACB a sus 33 años!

Mucho mérito cuando al lado tienes a gente como Luka Doncic (¡jugón!), Llull (con tu regreso a las canchas volvieron los títulos) o Carroll (eterno el artillero de Wyoming). Sus 27 puntos ante el Baskonia en el día en el que cayó la Liga 34 sellan un curso de ensueño.

Pablo Laso ha sido el artífice de una temporada para la memoria. En su tierra volvió a matricularse el míster. Desde que llegó, el Madrid no gana títulos, los devora. Este equipo es ejemplar. La vida sigue siendo blanca y bella...