Becky Hammon no está sola

Hace unos días, Pau Gasol escribió un artículo en The Players Tribune en el que concluía que ‘Becky Hammon puede entrenar en la NBA’. Ya ha sido asistente de uno de los mejores técnicos del mundo: Gregg Popovich. Que una mujer pueda dirigir un equipo profesional de baloncesto no debería generar la más mínima duda. Pero esa barrera existe, como demuestra que en 72 años no ha habido ningún caso en la liga estadounidense. Anna Montañana, que apunta a ser la Becky Hammon española, una ilustre exjugadora internacional que esta temporada ha entrado en el cuerpo técnico del Fuenlabrada en la ACB, lo explicó este jueves perfectamente con una frase: “Lo extraordinario hay que normalizarlo”. Ese es el objetivo del deporte femenino. Es más: ese es el objetivo de la mujer en todos los ámbitos. Largo, difícil, pero justo e imparable.

Anna Montañana fue una de las dos invitadas al primer foro de Inspiration Women, que organizan la FEB y As. Junto a ella, Inmaculada García, la presidenta de Loterías y Apuestas del Estado. Dos mujeres inspiradoras que se abren paso y abren caminos. Ambas dieron algunas claves. Immaculada: “En primer lugar es mucho trabajo, aunque es cierto que las mujeres tienen que trabajar más. Si te caes, te levantas. El mundo es del que se levanta”. Anna: “No tengo miedo al error. Me he lanzado a la piscina, a veces con agua y otras, no”. La mujer avanza. En la sociedad y en el deporte. Quizá no a la velocidad aconsejable, pero se ha andado mucho y aún queda mucho más por andar. Este tipo de jornadas como Inspiration Women o la Copa del Mundo de baloncesto que se va a celebrar en septiembre en Tenerife son dos ejemplos de ello.