Una final sólo es a dos

El Real Madrid de baloncesto juega la “Final Four”, que algunos periódicos traducen –muy mal-- como “final a cuatro” (en realidad significa “los últimos cuatro”). Esa traducción enfrenta dos términos contradictorios, lo que en lingüística se llama “oxímoron”, vocablo que ya usaban los antiguos griegos (los romanos hablaban por su parte de la contradictio in terminis, locución de significado más transparente para nosotros).

Por ejemplo, es un oxímoron “ruidoso silencio”, lo mismo que “profetizar el pasado” o “fuego helado”. Los poetas usan de vez en cuando estas combinaciones, porque su lenguaje no busca la precisión sino el efecto metafórico, y en él las palabras no designan sino que evocan, se desprenden de su tenor literal para reflejar sentimientos, sensaciones…, más que realidades tangibles. Y suele resonar en ellas el talento expresivo, como el de Teresa de Jesús con aquel “muero porque no muero”.

Sin embargo, el lenguaje periodístico se halla muy lejos de ese registro, no tiene intención poética y, por tanto, en él los oxímoron (en plural se escribe igual) incurren en la simple incongruencia.

Se comete, pues, un oxímoron al decir “Final a Cuatro” (por “Final Four”) porque las finales sólo pueden ser “a dos”. Uno no se imagina un partido decisivo del campeonato de Europa de baloncesto en el que participen cuatro equipos con solamente dos canastas; que eso sería una “final a cuatro”.

Cuando ya sólo quedan cuatro equipos en liza, éstos se enfrentan en dos partidos para definir, ahora sí, los dos finalistas. Pero mientras ese cruce previo no se produzca, no podemos llamar “finalistas” a los cuatro clasificados; sino en todo caso “semifinalistas”.

Así que la Final a Cuatro se debería denominar con mejor entendimiento “Fase Final”, o también “semifinales” (el hecho de que se disputen en una misma cancha no altera el significado de esa expresión tan habitual).

En el caso de “Fase Final”, nos perdemos el dato de que se trata de cuatro equipos (si bien la mayoría de los aficionados está al tanto de eso), pero lo mismo sucede cuando nos referimos a la fase final de un campeonato del mundo de fútbol, de balonmano o de baloncesto, pues también ahí se omite en la locución el número exacto de participantes.

Sin embargo, si alguien quisiera incorporar esa precisión, le bastaría con decir “Fase final entre cuatro” o “los últimos cuatro” (la traducción literal de “Final Four”). Lo demás es poesía. Y en este caso, mala.