Prohibido salir a especular
Ni Isco ni Nacho quieren perderse el partido más importante del año. El propio Zidane jerarquizó tras el 2-1 al Leganés la trascendencia del duelo con el Bayern: “Tenemos que jugar un partido enorme, enorme en todos los sentidos. Tenemos que estar como nunca hemos estado este año”. El marsellés avisa porque no quiere que se repita bajo ningún concepto lo sucedido en la noche de la Juventus o en otras citas en las que a los blancos se les ha atragantado eso de especular con el resultado. Desconozco si Isco o Nacho estarán al cien por cien para afrontar un encuentro de tantas exigencias, pero el solo hecho de que se hayan unido al grupo para presentar su candidatura demuestra el elevado nivel de compromiso de esta plantilla excepcional. Todos sueñan con Kiev, pero saben que el muro del Bayern será casi tan complicado como la hipotética final del 26 de mayo.
La idea es salir al campo como si el Madrid hubiese perdido 2-1 en el Allianz en vez de lo que afortunadamente ocurrió. Cuando el Madrid sale a cazar, siempre vuelve a casa con la mochila llena. Los jugadores de este bendito club no están diseñados para recular, amasar un resultado o entregarse a la inspiración de su portero. Aquí nos va la marcha, el ataque por sistema, irrumpir por las bandas como si fuesen lanzallamas y soltar en el momento preciso esa bomba-racimo llamada Cristiano Ronaldo. Ante el Bayern rechazo la idea de nadar y guardar la ropa. Cortemos de raíz la ambición bávara. Vayamos a por el partido sin disimulos. Esto es el Madrid. Esto es el Santiago Bernabéu.