Gracias a Carrusel puedo seguir el fútbol de otras ligas y hacer comparaciones fundamentadas desde el conocimiento. Cuando oigo esa famosa frase mil veces repetida de que los árbitros en España son muy malos, no puedo más que esbozar una sonrisa y pensar: qué atrevida es la ignorancia.

Cuando dices que son muy malos es porque los comparas con los de otras ligas, y ahí es donde ya esa mentira se viene abajo. Y esta introducción viene al caso del partido entre el PSG y el Olympique Marsella. Bueno más que partido, una especie de batalla con más de 38 faltas de las que una gran parte de ellas eran naranjas acercándose a la roja.

Gracias al arbitraje tan proteccionista que tenemos en nuestra liga, nos hace ver partidos realmente limpios y muy poco violentos. Cada año se escapan muy pocas entradas de las que sobran en el fútbol. Y si tenéis oportunidad, repasad los números del City que este año ha tenido más de siete lesionados debido a entradas violentas y muchas de ellas no sancionadas correctamente.

La limpieza de nuestro fútbol es gracias al rigor que impone el CTA a los árbitros para erradicar el juego violento y proteger, no nos olvidemos nunca, a lo más importante del fútbol que son los jugadores.

Por eso, cuando veo partidos como el de París me pregunto: qué diríamos aquí si esas entradas las viésemos todos los fines de semana. Por eso, gracias a todos los árbitros que defendéis el espíritu del juego, que no permitís el juego brusco grave y no os olvidéis que si os relajáis en el cumplimiento del reglamento, seréis los culpables del retroceso en términos de 'fair play' que se puede ver en otras ligas.