Vivir con sus propias ideas

Cada día de la semana entre las cuatro a las seis de la tarde la radio francesa RMC emite el programa Team Duga, conducido por el ex futbolista internacional, y campeón del mundo en 1998, Christophe Dugarry. Un hombre que tiene también la característica de ser uno de los amigos más íntimos de Zinedine Zidane desde que jugaron juntos en el Girondins de Burdeos. El jueves estuve en directo y expliqué que Zizou iba a “morir con sus ideas” y que sin ninguna duda confiará hasta el final en el 4-3-3 con Bale, Benzema y Cristiano, uno de los conceptos en los que el míster cree profundamente. Empezando por el partido de hoy y la importantísima cita del miércoles contra el PSG. Dugarry se enfadó conmigo o, mejor dicho, no le gustó la expresión “morir con sus ideas”. “¿Por qué morir?”, preguntó el ex jugador. “Prefiero decir, y pensar, que Zidane va a vivir con sus ideas”, añadió.

Lo que me explicó me hizo reflexionar mucho. Tiene razón Dugarry, Zidane sigue confiando en los que le han dado ocho títulos en dos años porque piensa firmemente que esta fórmula le va a permitir seguir vivo en la única competición en la que todavía puede tener esperanzas. No porque sea incapaz de mover piezas o de liderar una revolución. No porque pretenda demostrar a no sé quién que sólo él lleva razón y que los demás se equivocan cuando piden cambios radicales en el once. No sé lo que hará Zidane la temporada que viene, pero es evidente que estos cuatro meses que quedan los va a dedicar a vivir intensamente con sus jugadores, no a morir poco a poco con las ideas de otros.