NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Con Isco yo iría también “a muerte”

Me gusta que los jefes den la cara por sus empleados y que les defiendan públicamente. Eso les da credibilidad ante el grupo. Pero ya les he dicho muchas veces que la autoridad se gana, no se impone. Por eso, Zidane cae en un error de manual cuando en conferencia de Prensa justifica su empeño obsesivo con Benzema asegurando que “es el mejor” o que va a defenderle “hasta la muerte”. Jamás había visto una defensa tan apasionada de un entrenador por un futbolista suyo. El problema es cuando llega otro jugador, mucho más determinante que el francés en la conquista de los últimos cinco títulos, y lo dejas en el banquillo en el Día D y a la Hora H. Si yo fuera Isco, estaría dolido y fastidiado...

Claro que Isco había bajado un pelín estas últimas semanas sus increíbles prestaciones de los últimos meses. ¿Pero acaso no ha sido mucho peor el hundimiento progresivo de Karim en su presunta posición de nueve? Estos días he visto al Kun goleando con el City, a Lewandowski con el Bayern, a Cavani con el PSG, a Kane con el Tottenham, a Luis Suárez con el Barça... Los nueves viven del gol, excepto Benzema. El jefe le ha liberado de esa cargante misión. No lo entiendo. Esto es como si a un pívot le dicen que es tan bueno que no es necesario que capture rebotes. No conozco ni un solo caso, señores...