El paciente puede hacer vida normal

El adenocarcinoma de próstata es un cáncer de próstata localmente avanzado. Hay dos tipos de hombres: los que padecen de próstata y los que van a padecerla. Es difícil morir como consecuencia de un cáncer de próstata pero se puede morir con ello. De ahí la importancia que tiene hacerse reconocimientos médicos periódicos para detectar la presencia de un tumor de próstata rápido y poner el tratamiento adecuado. En la actualidad, normalmente se usa la cirugía radical para extirpar totalmente la próstata. Si se coge a tiempo se acabó el problema. Hoy en día la cirugía está tan avanzada que una vez que se detecta a tiempo es relativamente fácil realizarla o bien a través de laparoscopia o bien con el robot Da Vinci. Hay otras como el láser verde, aunque tengo más fe en las otras dos.

En caso de que quedasen restos se procedería a llevar a cabo una de estas dos opciones: la técnica focal o la radioterapia y según el estado del paciente tras la operación se decidiría cuál de las dos opciones emplear o si no hay que llevar a cabo ninguna. El riesgo de que el cáncer se reproduzca es muy bajo y por eso se hacen controles periódicos del PSA a menudo, una vez ha sido intervenido el paciente para detectar si hay una posible recaída. El entrenador del Sevilla, Eduardo Berizzo, podría hacer vida normal. Sólo le afectaría durante un par de semanas y podría entrenar perfectamente hasta que le operen. Tampoco necesita hacer una dieta especial ni cambiar sus hábitos.