La élite, tan cerca y a la vez tan lejos
Nueva Condomina vivió ante el Barça uno de esos días para los que se puso en pie, albergar fútbol de primer nivel. Pero la casa del Real Murcia sólo ha podido disfrutar de ello durante un curso en Primera División y en determinados encuentros, como los de la Selección española y la última visita del Real Madrid en Copa del Rey hace siete años. En estos encuentros, entrenadores, jugadores y prensa visitante siempre hablaron de “un estadio de Primera” y un club “con solera que circunstancialmente está en Segunda B”.
Por desgracia para los murcianistas la élite queda lejos. Para ver a los grandes hay que aferrarse a la Copa del Rey. Hoy se viven días complicados tanto en lo deportivo como en lo económico. El equipo no ha empezado bien la temporada a pesar de la importante inversión realizada el pasado verano. En el plano económico la incertidumbre acerca del futuro siempre está presente, pues la deuda sigue creciendo con el paso de los años y de la llegada de nuevo propietario. Ya lo ven, Murcia vivió un tiempo en la élite, ayer gozó de ella durante dos horas pero la duda está en si volverá a ella o tendrá que esperar a futuras ediciones coperas.