Tebas prende la mecha Neymar-PSG
Dos periódicos de gran influencia europea, el deporivo L’Équipe, desde Francia, y el generalista Frankfurter Allgemeine Zeitung, desde Alemania, dedicaban ayer sendas páginas a Javier Tebas. Las provocó su sonada intervención en Manchester reclamando la aplicación del juego limpio financiero. Con su intervención, un tanto provocadora, como suelen ser las suyas, ha conseguido lo que pretendía: agitar el debate sobre este asunto. Él plantea que el PSG (y el City en su medida) son clubes-Estado, que juegan con unas posibilidades de las que otros carecen. Actúan en el mercado sin las reglas de éste. Y lo distorsionan.
No es el único que piensa esto. Lo ha dicho también Mourinho, por ejemplo. Pero Tebas tiene en este campo una ejecutoria que le respalda. La Liga española venía siendo un bebedero de patos en el que salía el dinero de ningún lado, se debía una enormidad a Hacienda, la inflación era desbocada, muchos jugadores no cobraban y los clubes iban entrando alegremente en la ley concursal. Aquello lo paró con un control riguroso establecido desde LaLiga. Ya nadie ficha si no cumple una ecuación ingresos-deuda-gastos. Ha dado orden a nuestro fútbol y mejorado su prestigio. Ahora LaLiga es mejor y recauda mucho más por televisión.
En Europa se planteó esto antes que en España: el ‘financial fair play’, se llamó. En realidad, nada distinto en su esencia de las normas de competencia que rigen en cualquier ámbito del mercado. En toda Europa se vigila el cumplimiento de las reglas de la competencia con rigor. En toda Europa menos en la UEFA, claro, que fingió preocuparse por el asunto pero ahora se desentiende. Es difícil aceptar que el PSG o el City generen por el curso normal de su explotación futbolística las cantidades que están gastando. Cuanto más se hable de esto, mejor para todos. En ese sentido, esas dos páginas que ha arrancado Tebas son un éxito suyo.