La 'Mannschaft' cambia de motor

Adiós a Mercedes-Benz. Es mucho más que un simple cambio de cromos. Ser patrocinador de la selección alemana de fútbol vale su peso en oro, más que eso, vale exactamente 25 millones de euros al año. Es lo que desembolsará Volkswagen a partir del 1 de enero de 2019, fecha en la que arranca su relación contractual con la DFB. La que abandona el terreno de juego es Mercedes-Benz, patrocinadora de la Mannschaft desde hace cuatro décadas.

Del Kaiser a Götze. Cuatro décadas, se dice pronto. Lo que ha corrido el balón y más en los pies de quienes acostumbran a lucir de pantalón negro y camiseta blanca. Hablamos de campeones como Sepp Maier o Franz Beckenbauer, de Paul Breitner o Karl-Heinz Rummenigge, de Lothar Matthäus o Rudi Völler... La estrella de plata acompañó sus éxitos y lució también en la equipación con la que los internacionales alemanes se entrenaban en el Mundial 2014 (del que fueron campeones gracias al gol en la prórroga de Mario Götze) o en el autocar descapotable con el que celebraron el título días después por las calles de Berlín.

1972 y un autocar. El romance se inició en 1972 de la forma más casual: poniendo a disposición de la DFB el autocar en el que trasladar a sus jugadores. Y hasta ahora... 1972 fue año de bienes, como muchos otros en la Mannschaft, el de su primer título en la Eurocopa tras tumbar a la Unión Soviética (3-0). Caería luego otra (1980) y un Mundial (1974) hasta llegar a 1990, cuando la marca de Stuttgart se convirtió en el patrocinador general de la selección. Y de nuevo año de bienes (apuesto a que también de nieves...), pues conquistó su tercer Mundial. Sí, aquel del penalti inventado por el árbitro mexicano Codesal y que Brehme transformó en el gol de la victoria. Un penalti que no fue, como el propio Andreas reconocería años después.

Volkswagen. Desde 1990, la estrella de plata brilla en la equipación de la selección absoluta y de las categorías inferiores; en los anuncios, en los autocares... incluso los chóferes también son made in Mercedes-Benz. Pero en 2019, la estrella dejará paso a una V y una W, los lazos que unen esa Volkswagen que tras años de turbulencias agradecerá el aire que se respira en lo más alto del Ranking FIFA. De patrocinador de la Copa Alemana o el Wolfsburgo pasa a ser santo y seña de la Mannschaft. La selección que cambia de motor. Por si no tuviera bastante con el carburante que le dan los goles.