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La Copa Davis languidece

El choque de intereses entre la ATP, los jugadores y la ITF (más las federaciones nacionales) ha acabado por convertir la Copa Davis en un torneo menor, que estorba siempre en medio de un calendario inhumano, con once meses de competición al año y torneos en los cinco continentes. A los mejores tenistas del planeta hace tiempo que casi nunca les viene bien interrumpir su programación, hoy en día medida al milímetro, para afrontar un viaje incómodo, un cambio de superficie, duelos al mejor de cinco sets y con el que asumen un coste de oportunidad en ganancias personales nada desdeñable.

Las renuncias se encadenan eliminatoria tras eliminatoria, desvirtuando y restando interés a la competición. El actual Serbia-España (2-0 tras la primera jornada) es el enésimo ejemplo de ello. Pero no es un problema único de España, que recuperó la paz interna con el relevo en la presidencia de la RFET y la llegada de Conchita Martínez a la capitanía del equipo. Es un problema general que se extiende sin remedio, a pesar de que en los últimos años hemos visto levantar la imponente ensaladera a ilustres del top ten de los últimos años como Nadal, Djokovic, Berdych, Federer y Wawrinka, Murray o Del Potro…

Sin embargo, ningún aficionado al tenis olvida mencionar esos títulos al repasar el palmarés de sus ídolos. Esto sucede porque igual que los Grand Slams o el torneo de maestros, la Davis sigue siendo clave para medir la gloria de un tenista. Y el aficionado al deporte, que gracias a la Davis miraba tenis, no entiende la permisividad que las federaciones de tenis tienen con sus estrellas. Es obvio que en la mayoría de los deportes ciertas decisiones no se toleran o acarrean consecuencias graves.

Para muchos tenistas la solución es hacerla cada dos o cuatro años, unificando sede y/o superficie, a modo de mundial para entendernos. Para otros basta con hacer algunos retoques para evitar que se pierda la esencia y el sabor de la competición. Pero hace tiempo que es hora de tomar decisiones para que siempre jueguen los mejores y mejore el espectáculo.