Cholo, ya toca jugar bonito
Se inicia la temporada de despedida del Vicente Calderón con un Atleti a la altura del equipo que inauguró el estadio de la ribera del Manzanares hace medio siglo. Gracias al espectacular hacer de Simeone en el banquillo, acompañado por una buena gestión de Miguel Ángel Gil, el último lustro el Atlético ha dado un enorme salto de calidad y ha vuelto a mirar a los ojos a Madrid y Barça en la Liga y en la Champions. Los resultados que ha obtenido el Atleti, con el Cholo de líder y un elenco de futbolistas formidables que se han dejado convencer rindiendo a gran nivel, han sido magníficos, con títulos incluidos, logrando además la regularidad de clasificarse todos los años para la Liga de Campeones, cumpliendo el objetivo marcado por el club. Todo el crecimiento del Atleti se ha visto traducido en varias merecidas mejoras pecuniarias al entrenador y a los buques insignias.
El Cholo lo ha hecho de cine en el Atleti. Pero le falta la peseta para el duro. Le falta que el equipo sea más vistoso. Para despedir el Calderón no estaría mal que hiciera jugar mejor al Atleti. Porque su Atleti es una roca, pero hay muchos partidos que son complicados de ver. La pasada campaña lo intentó con un 4-3-3, pero dimitió rápido de su idea y volvió al 4-4-2. Para este curso tiene mimbres para hacer un 4-3-3, con Carrasco y Gaitán abiertos, y jugar bonito y bueno. Pero el Cholo es de condición amarrategui (con más osadía podía haber ganado la Champions en Milán) y la cabra tira al monte. Para despedir al Calderón, los aficionados atléticos se merecen un poquito más de fútbol. Y futbolistas hay para jugar mejor. Simeone ha reducido su discurso. Pensó en irse, pero tras la reflexión eligió quedarse (¡?). Ahora toca jugar bonito, Cholo. El Calderón se lo merece.