Sobre la ‘butragueñada’ de Benzema
Estaba el partido de Getafe empezando a atascarse cuando avanzaba la segunda parte. El suelo duro e irregular le costaba al Madrid. El Getafe se vaciaba para oponer dificultades a las estrellas del equipo blanco. Se les empezaba a notar impacientes, incómodos. En eso, James adelantó un balón profundo en el área a Benzema, que hizo la jugada del partido y de la semana. Una jugada muy de Butragueño, entrando como funambulista por la línea de fondo, alternando los pies en la conducción. Finalmente, en lugar de marcar él mismo como hizo Butragueño aquel día ante el Cádiz, le dio el gol hecho a Cristiano.
Gran jugada, oportuna, y coronada en perfección. Confieso que en los últimos partidos me estaba empezando a cargar otra vez Benzema. Aguanto mal su melancolía. Pero cada vez que le veo una de estas (y esta ha sido la mejor) le renuevo mi confianza. Como me pasaba con Guti, pienso que iban para toreros. En el toro, lo que queda tras una carrera no son las orejas, sino un corto ramillete de detalles de los que el aficionado habla durante años. Como esto de Benzema o Butragueño, o aquel taconazo de Guti renunciando al gol para que marcara precisamente Benzema. Pellizcos de toreros grandes. Momentos de éxtasis.
Luego se abrió el Getafe y James metió dos centros cruzados desde su lado, perfectos, para que Bale y Cristiano abrocharan un resultado contundente. De los tres de la BBC, el único que no marcó fue Benzema, pero encontró la fisura y nos dejó una hermosa jugada que nos quita unos años de encima. A Butragueño se le veía feliz, en la entrevista con Noelia Blasco, sabiendo que esa jugada desempolvaba su recuerdo. Como Benzema, él no era jugador de goles, pero sí de muletazos de cartel. Para los goles tenía a Hugo Sánchez y Benzema tiene a Cristiano, que cierra la primera vuelta ¡con 28!