Madrid y Milán, unidos por Ancelotti

Buen partido en Dubai, en el contexto de esos festejos que lleva algún tiempo organizando Jorge Mendes, el gran hombre de negocios futbolísticos del momento. Para nosotros, el partido llega con un prólogo oportuno, la conferencia de prensa a dos voces que dieron Gil Marín y Torres, en vísperas del retorno de éste al Atlético. Estuvieron bien los dos. Gil Marín enfatizó que se trata de una decisión deportiva, y así es: lo pidió el Cholo este verano. Torres recordó que ha latido con el Atlético estos siete años, que ha saltado con sus goles desde el sofá. Ahora podrá celebrarlos en el campo, con sus compañeros.

Pero estaba en el Madrid-Milán, todo un clásico. Son los dos clubes con más títulos internacionales, veinte cada uno si incluimos la Copa Latina, que a mi juicio merece estar. También tiene veinte el Al Alhy de Egipto, mérito indudable, pero estamos hablando de otra cosa. Admiro desde siempre al Milán porque siempre estuvo ahí. La final que más le costó al Madrid de Di Stéfano fue justo ante el Milán, la tercera, que necesitó de prórroga. Su presencia en el primer plano europeo ha sido tan insistente como la del Madrid, siempre con equipos brillantes, de fútbol elegante y efectivo.

Veinte títulos. En once de ellos ha estado Ancelotti, como jugador o como entrenador. También en los tres últimos del Madrid. Ancelotti representa el abrazo entre estas dos casas, amigas desde hace tiempo. Llegó al Madrid admitiendo que al club no le bastaba con ganar, sino que tenía que hacerlo con brillantez, y ha cumplido. Hoy publicamos un extracto de su entrevista en ‘La Gazzetta dello Sport’, un repaso mes por mes del año que termina. Es una muestra de claridad y sencillez. Escuela Sacchi, tradición milanista para provecho de este nuevo Madrid, que ayer hizo pleno en Dubai. Buen tipo este Ancelotti.