Alemania contra los fantasmas del pasado
¿Quizás debido a la nueva interpretación del fútbol germano? Los equipos campeones en los anos 54, 74 y 90 siempre serán recordados por jugar al más puro fútbol alemán. Potencia, fuerza y disciplina sobre el terreno de juego. Pero fue llegar Jürgen Klinsmann y darle una vuelta por completo a la ideología teutona. De repente se apostaba por jugones, por el toque y la belleza del juego. La Mannschaft gustaba mucho, se llevó al pueblo alemán, pero al final siempre se quedaba a las puertas de la gloria.
Esta vez es diferente. Alemania sigue jugando bonito, pero también logra ganar partidos luchando. Los goles nacen desde el toque, pero si Müller tiene que meterlos de puntera, tampoco pasa nada. Casi igual que el Müller de los años 70. Alemania vuelve a ser la Alemania de siempre. Esa Alemania que en la fase final de los campeonatos es más fuerte que nunca. Esa Alemania que no falla cuando toca sacar pecho. Y no cabe la más mínima duda que esta tarde no fallará. Porque Alemania es así.