El cross no quiere sospechosos

España es un país de referencia en el cross. Celebra más carreras que ningún otro; las de más calidad, también. Las de Atapuerca, Alcobendas, Itálica, Elgoibar y Venta de Baños figuran entre las diez mejores del mundo, con el cross burgalés a la cabeza; Italia, Escocia, Irlanda del Norte, Francia y Portugal sólo logran meter una de sus carreras de campo a través en el top-10. Sirva esto para situar la importancia del cross español, cuya asociación (ACNO) conmemora este año su 25 aniversario. Celebró por ello una gala muy especial, en Santo Domingo de Silos, con abundantes premios. Pero no dio el de mejor atleta español del año, en una decisión que honra a ACNO, y que se desmarca de la línea que traza Odriozola en la Federación.

Ese premio correspondía a Pentinel por haber sido el mejor atleta español en las carreras donde ha participado este año. Pero Pentinel fue detenido hace un mes, acusado de tráfico de sustancias dopantes. Para Odriozola, hasta que no se demuestre lo contrario ningún atleta es culpable. De hecho, Pentinel no está sancionado. Pero la ACNO, en cambio, ha actuado en consecuencia. Ese premio queda en suspenso hasta que no se resuelva el caso. Si Marta Domínguez o Contador recibieron reconocimientos en desagravio a las acusaciones que recibían, esta vez no ha sido así. Una muestra de cordura por parte de ACNO, que ha dignificado el atletismo con un gesto que viene a ser toda una condena al dopaje. Lo contrario que hace la Federación.