El Cholo cumplió con la historia

Diego Pablo Simeone debía dar el do de pecho anoche. Y lo dio. Como todos sus jugadores y como la afición del Atleti, que siempre gana en las finales. Simeone estaba ante el partido más importante de su corta y exitosa carrera de entrenador. Se enfrentaba al Madrid en su estadio y en una final. No podía fallar en su planteamiento. Cristiano adelantó al Madrid con un golazo a lo Santillana y el Cholo no cambió el plan que había diseñado junto al Mono Burgos, el profe Ortega y Juan Vizcaíno. Y en una jugada arrancada por Mario y dirigida magistralmente por Falcao, Diego Costa hizo el empate. Los postes jugaron ayer con el Cholo. No los había puesto en el pizarrón del Mono Burgos, pero el Madrid se encontró con la madera hasta en tres ocasiones y con Juanfran aguantando, con Courtois batido, el disparo de Özil. La cuota de suerte para ganar una final se ponía de parte de Simeone. Por primera vez en la historia se vio a la afición del Madrid desquiciada con un árbitro jugando ante el Atleti. También era bueno ese factor para los hombres del Cholo.

En la grada, la fiesta enfrentada de ambas aficiones era preciosa. Y el partido llegó a la prórroga. Y ahí apareció Joao Miranda para poner por delante al Atleti. Ese Miranda en el que sólo confió el Cholo cuando llegó (se le quería traspasar en enero de 2012 y dejar libre su plaza de extracomunitario). Le devolvió la confianza por todo lo alto en el partido más importante de la carrera de Simeone. El Atleti ganó anoche el derbi que valía. El Cholo cumplió con la historia y ganó la cuarta final del Atleti en Chamartín ante el Madrid de las cuatro que se han jugado. El Cholo ha devuelto al Atleti a su lugar en el mundo.