Entre un 15% y un 30% más de velocidad

Pistorius no entró en la final de 400. Pero fue despedido como un héroe de la pista. Y lo es. Ha demostrado que la voluntad y la fuerza humana pueden vencer los obstáculos y conseguir los objetivos perseguidos. Tiene que estar satisfecho. Encontrarse entre los 24 atletas más rápidos del mundo en los 400 metros es una gesta en cualquier condición. Llegar más lejos hubiera desencadenado una polémica con imprevisibles consecuencias.

Pistorius está autorizado por el TAS a correr los Juegos, los Mundiales o cuantas competiciones quiera sin restricción alguna, en una decisión que se vio influenciada por aspectos humanos que conmueven a todos. Pero si se toman en consideración análisis objetivos basados en informes que motivaron a que la IAAF prohibiera competir a Pistorius con prótesis de carbono, la conclusión es clara: Pistorius corre con ventaja.

Estudios de las universidades estadounidenses de SMU y Wyoming determinaron que la disposición biomecánica de las prótesis del atleta desarrollan una gran energía cinética, con el resultado de una menor energía potencial. El doctor Weyard realizó análisis biomecánicos con cámaras de alta definición, y llegó a la conclusión de que las prótesis que utiliza Pistorius potencian una velocidad entre un 15% y un 30% superior al atleta normal y, además, con un peso de la mitad de las piernas de un atleta al que no le falte la parte inferior de las mismas.

Reconocidos los méritos humanos de Pistorius, es evidente también la mejora que le proporcionan las prótesis en cuanto a rendimiento deportivo respecto a sus rivales.