Benzema, Kaká y ahora le toca a Özil

Benzema, Kaká y ahora le toca a Özil

Mientras el Barça se daba otra ducha de felicidad en Praga (Guardiola llegó a los 200, Messi llegó a los 202, récord para Víctor, vuelta de Alexis, canteranos a go-gó...), el Valencia pasaba las de Caín en Mestalla ante el Bayer Leverkusen. Y, curioso, el partido se desatascó cuando Emery hizo un cambio que el público reprochó estrepitosamente: "¡Burro! ¡Burro! ¡Burro!..." clamó Mestalla. Pero del 1-1 que dejaba al Valencia fuera se pasó a un 3-1 que le mejora hasta el particular con el Bayer y despeja el futuro. No llego a comprender esa inquina de Mestalla contra cualquier entrenador que le pongan.

Y ahora, el Madrid en Lyon, en busca de su primera victoria, que ya va tocando. Roncero, tan atento a estas cosas, me enumeró ayer la secuencia de resultados del Madrid en sus cuatro recientes salidas allí en Champions: 3-0, 2-0, 1-0, 1-1... Así que si es verdad la ley de las progresiones aritméticas que estos días estudia mi hija, al Madrid le toca ganar por uno. Por uno basta. Lo que el Madrid necesita es que le sobre el último partido, la visita al Ajax, que es en vísperas del Clásico. Así podrá ahorrar energías ese día. Ya ven: en estos tiempos todo se mide siempre en función del siguiente Clásico.

Mourinho desembarcó de buen humor en Lyon. "Este equipo es más equipo", dijo, y añadió que el año pasado la conjunción de bajas que hoy presenta el Madrid sería preocupante. Y es verdad: el Madrid es más equipo en todos los sentidos, tiene un juego más solidario y una plantilla más maciza. La única tuerca floja hoy puede ser la de Özil, al que se ve alicaído. Necesita un buen partido y el Madrid necesita que lo haga esta noche. Y no lo descarto. En peores condiciones hemos visto a Benzema y Kaká, y Mourinho los ha recuperado a los dos. Esta noche veremos cómo va el tratamiento del tercero.