La huelga 'sui géneris' de nuestro fútbol

La huelga 'sui géneris' de nuestro fútbol

Este fin de semana se podrían haber jugado un Madrid-Athletic, un Málaga-Barça, un Betis-Sevilla y un buen montón de partidos más, pero no se jugarán. La jornada está aplazada 'sine die' por una huelga que Rubiales tenía bastantes ganas de convocar y que la Liga no ha sabido esquivar porque no tenía mucho más que ofrecer que lo que ha ofrecido. Ya ni hay dinero ni dónde buscarlo. Si aún hubiera un banco lo bastante loco como para prestar más dinero al fútbol no podría hacerlo, porque ya no tienen dinero de los bancos. Y la administración tampoco tiene nada que inyectar, ni está en posición de hacerlo.

En realidad, Rubiales ha conseguido un éxito desde que está: la Ley Concursal, cuyo uso y abuso ha sido lo que ha colmado la paciencia de los jugadores, no se podrá utilizar impunemente desde el fin de la temporada. Una transaccional que está en trámite parlamentario hará que quienes la utilicen en el futuro, desciendan. Eso sujetará a directivos imprudentes. Pero el dinero que se ha prometido y no se ha pagado, ese es muy difícil que aparezca ya. Rubiales no se dio por satisfecho con aquel éxito y ha llevado al fútbol a este paro al que no veo provecho posible. Y tampoco se está siguiendo estrictamente.

Sólo Rayo, Betis, Sporting, Racing, Recre, Valladolid y Girona lo han cumplido de forma integral cesando toda actividad viernes, sábado, domingo y lunes. Los demás han mantenido entrenamientos algunos, varios o todos esos días. El Barça jugará el Gamper mañana, en pleno periodo de huelga. Supongo que esta semana habrá que buscar una salida, que se empezará la liga una semana tarde y que habrá que recuperar esta fecha malamente. Así se devolverá el trabajo no hecho. Eso no es una huelga, eso es dar el cante. No me ha parecido del todo serio y me temo que no sirva para nada.