El entrenador del Xerez, Esteban, sabe que su trabajo al frente de la entidad andaluza es excelente. Nadie se lo tiene que reconocer, el equipo es líder destacado y hoy puede dar un paso más hacia Primera. Pero Esteban vivió en su etapa como futbolista la experiencia de jugar en un grande de la importancia del Barça y es ahora, con el ascenso tan cerca, cuando tiene que trasladar esa mentalidad ganadora a sus jugadores.

Sabe El Boquerón que el eufórico recibimiento al equipo tras ganar en Girona y el ambiente festivo de la Feria de Jerez no deben ocultar que aún quedan 18 puntos por disputar y que su partido ante el Castellón no será fácil. Los orellut tienen buenos futbolistas que pueden aprovechar la falta de presión clasificatoria para mostrar lo mejor de su repertorio. Los anteriores intentos frustrados de ascenso han hecho que en la entidad azulina conozca el sabor amargo de la decepción, pero ¿quién piensa en eso cuando la alegría se desboca? Por eso, el papel de Esteban y el de los veteranos, con Vicente Moreno a la cabeza, es mantener la cabeza fría hasta tener el ascenso en el bolsillo.