Sobre la lesión de aductores

La lesión de los aductores suele iniciarse con molestias llevaderas que no impiden entrenar y que aparece a nivel del aductor mayor a nivel de la ingle. Estas molestias van haciéndose más intensas y aparecen incluso en reposo. El dolor va extendiéndose al pubis, se produce un desequilibrio muscular en la encrucijada púbica entre los músculos rectos anteriores que tiran para arriba y los aductores que tiran para abajo y terminan produciendo la temida osteopatía de pubis.

Los estiramientos selectivos, los masajes adecuados, los ejercicios isométricos y báscula pélvica conjuntamente con unos entrenamientos controlados, antiinflamatorios e infiltraciones suelen aliviar el cuadro en muchas ocasiones. En otras, en cambio, la cirugía es el único camino para la curación. Lógicamente, en el tiempo que dura esta lesión el rendimiento del deportista se resiente considerablemente, ya que su estado físico no es el idóneo. Los entrenamientos intensos, los viajes constantes, la falta de descanso y la fatiga muscular son los responsables de la aparicion de estas lesiones.