NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

El peligro es que Schuster aprenda a caer

Hay un viejo mito en boxeo: el del boxeador que aprende a caer. Se trata del boxeador que se cree imbatible, que gana, gana y gana. Le entran los golpes, esquiva, 'rueda' o encaja bien los que le envían. Se acostumbra a ganar. Se siente lleno de fe, tanta como prestigio tiene ante sus rivales y como temor les transmite a estos. Es ganador y popular. Hasta que de repente un día le entra una mano contraria en la mandíbula y le derriba, y prueba el golpe de la lona en el culo, y luego en el costado, y ve estrellas, y le pesa la cabeza más que el culo y le cuentan diez sin poderse levantar. Y cuando se levanta ya no es el mismo.

Recuerdo esto cuando veo al Madrid de estos días, tan diferente del que se marchó de vacaciones. Es un equipo que ha aprendido a caer. Ante el Mallorca dos veces, ante el Roma dos veces, ante el Almería, ante el Betis, ante el Getafe. Jugando bien, regular o mal, jugando mejor que el contrario o jugando peor que el contrario, el caso es que el Madrid ha perdido siete partidos en lo que va de año, y estamos empezando el tercer mes. Se está acostumbrando a perder. Ha aprendido a caer, dirían los clásicos del boxeo. Aquel equipo capaz de encajar sin daño cualquier castigo en la noche del Camp Nou ahora es otro.

Ahí quiero ver a Schuster, no en las salas de prensa, donde el espectáculo es fácil y grosero. Ahí le quiero ver, levantando a un equipo que vacila y duda. De momento, anteanoche no dio muestras sino de medrosidad. Todas sus decisiones respecto a la alineación inicial carecieron de atrevimiento: veteranos, jugadores con cartel aunque fueran lesionados fuera de punto, actitud de equipo a ver qué pasa, a ver si sin hacer ruido cazamos el golito sin encajar ninguno. Y el resultado fue encajar dos, más dos tiros en los palos. Espero que no sea Schuster el que haya aprendido a caer, porque en ese caso no habrá remedio.