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MOTOGP | MISANO

Misano será lo que diga Bagnaia

El líder reaparece tras su terrorífico accidente en Montmeló y, aunque debe obtener el OK médico, se espera que lo consiga sin problema y que sea el hombre a batir.

Pecco Bagnaia.

Segunda semana consecutiva con las MotoGP sobre la pista. Esta vez el escenario es el Marco Simoncelli de Misano, que alberga el GP de San Marino y, lo mismo que antes de acudir a Montmeló se intuía que en el trazado catalán sería Aleix Espargaró el que llevaría la voz cantante, ahora se espera que todo discurra según lo que diga Francesco Bagnaia. Y eso a pesar del terrorífico accidente que sufrió el campeón y líder de la general el pasado domingo...

Pecco se cayó pocos instantes después de la salida, escapando de la segunda curva y con una escalofriante salida por orejas que le dejó en medio del asfalto cuando el pelotón iba tras sus pasos. Fue inevitable que alguno contactara con él y Brad Binder le pasó con su KTM por encima de sus piernas mientras el italiano giraba sin control sobre el asfalto. Milagrosamente y tras el enorme susto inicial, Bagnaia no tuvo ninguna lesión grave que lamentar y todo quedó en múltiples contusiones que no le impedirán tomar parte este fin de semana en su segunda carrera de casa.

Tras pasar por la clínica del circuito y por el Hospital General de Cataluña, el piloto pudo viajar el pasado domingo con el resto de la expedición Ducati rumbo a casa y ahora podrá subirse de nuevo a lomos de su Desmosedici, aunque antes deberá obtener hoy el OK médico que le declare apto para el gran premio. Al habla con AS, el doctor Ángel Charte, asegura a este diario que cree que Bagnaia no tendrá problema alguno en ser declarado apto, porque el mismo domingo ya estaba bien.

De este modo, el jefe de filas de Ducati se presenta en el Marco Simoncelli con 50 puntos de ventaja sobre Jorge Martín, el primero de sus perseguidores y el mismo que aprovechó su baja en la carrera de Cataluña para recortarle 16 puntos, gracias a su buen tercer puesto, un resultado que también le permitió ampliar hasta los 21 su ventaja sobre el tercero, Marco Bezzchi. Él fue uno de los cinco implicados en la caída de la primera curva y, aunque pudo tomar parte en la segunda salida, sólo le dio para ser duodécimo.

Ellos tres deberían ser las grandes referencias del fin de semana en una pista en la que no se espera, ni de lejos, a las Aprilia al mismo nivel que Montmeló, donde firmaron un histórico doblete Aleix y Maverick. Respecto a KTM, Brad Binder es el cuarto de la general y el estandarte de una marca que sigue sin saber qué hará la próxima temporada, porque de momento tiene cinco pilotos para cuatro motos, el sudafricano, Miller, Pol, Augusto y Acosta. El que sí corre esta temporada, como piloto invitado, es Dani Pedrosa, que ya lo hizo a principio de curso en Jerez y deslumbró con un sexto en el esprint y un séptimo en la carrera.

Y de las marcas japonesas no se espera nada ni ellas lo esperan tampoco de Misano, porque tanto Honda como Yamaha tienen más interés en el test del lunes, donde esperan estrenar la génesis de sus prototipos de 2024, que han de ser mucho mejores que los de este año si quieren acercarse a la competencia. En el caso de Marc Márquez, además, podría condicionar hasta su futuro ese test porque, de encontrarse otro botijo de moto, lo mismo cambia su discurso de que el año que viene seguirá en Honda porque tiene contrato...