Márquez vuelve a ser Márquez con la Ducati
La sonrisa de oreja a oreja en su primera parada delataba su felicidad por el cambio, lo que refrendó con un cuarto tras Maverick, Binder y Bez.
Llegó el esperado debut de Marc Márquez al manillar de la Ducati y sólo hicieron falta ocho vueltas para darse cuenta de que ha acertado con el cambio. Tras quitarse el casco, el expiloto del Repsol Honda mostró una sonrisa de oreja a oreja en su primer regreso al box, confirmando a las primeras de cambio que pilotar la Ducati le hace a un piloto la vida mucho más fácil, tal como viene diciendo hace tiempo su hermano, que emprendió ese mismo camino el año pasado y lleva encantado desde el primer día. El ocho veces campeón ha dado este paso para volver a sonreír, pero también para ser competitivo, y Márquez vuelve a ser Márquez al manillar de la Ducati, de la que deja Zarco concretamente.
El de Cervera llegó a ponerse líder por vez primera con su nueva montura a las 15:21, volvió a marcar la vuelta rápida a las 15:47 y acabó el esperadísimo test de Valencia cuarto, sólo superado por Maverick Viñales, especialista en los viernes de GGPP y en los test de pretemporada, que le dejó a 0.171, Brad Binder (marcó su vuelta rápida a 7:30 del final y se cayó en el siguiente giro) y Marco Bezzecchi, con el que se las tuvo tiesas el pasado domingo tras acabar la carrera, porque el italiano fue a buscarle al camión para echarle la bronca. Que se vaya preparando, porque la suya será una de las facturas que se cobre en 2024...
La jornada arrancó más fría que en los días de GP en el Ricardo Tormo de Cheste, con un viento que enfriaba el asfalto y dificultaba el manejo de las motos, sobre todo en las curvas 1 y 13, porque movía la rueda delantera, lo que no impidió que los cronos fueran interesantes. A la hora del parón televisivo de la una, el ocho veces campeón había hecho tres salidas a pista de 8, 9 y 4 vueltas, con un mejor crono de 1:30.222 que le dejaba a 0.298 de Maverick, ya el más rápido hasta ese momento, y quedando las mejores vueltas del #93 para para las siguientes cinco salidas de 7, 6, 6, 3 y 6 giros, para un total de 49, con su mejor crono establecido, curiosamente, en el giro 46, el número del inolvidable Rossi.
Como la mañana arrancó fría, Marc se tomó con calma su primera salida con la nueva moto. La pista se abrió a las diez de la mañana y el primero en empezar a rodar fue Luca Marini, que se estrenaba con la Honda de un Márquez que no arrancó hasta las 11:14. En ese primer run de 8 vueltas ya sufrió su primera colada, en la frenada de la curva 1 de su tercera vuelta, lo que no le intimidó lo más mínimo, porque siguió tirando y de la sexta a la séptima vuelta de esa tanda mejoró en 1.5 su tiempo, para regresar un giro después al box y dejar esa imagen que todo el mundo estaba esperando, esa primera reacción que fue una sonrisa de oreja a oreja. En sus dos siguientes salidas, su mejor tiempo llegó en la vuelta 20 de las 21 que generó la admiración de un entrañable rival, Davide Tardozzi, team manager del Lenovo Ducati, que calificó en Dazn como “impresionante” los primeros pasos de Marc con la moto italiana.
Esa colada de la primera tanda no fue la única del día para Márquez, porque tuvo otras dos más de nuevo en ese punto, el de la primera frenada, pero ni de lejos rozó la caída en su estreno como ducatista, y eso es otro punto a favor, porque viene de caerse 29 veces con la Honda en la temporada recién acabada, y eso que se perdió los GGPP de Argentina, Texas y Jerez, además de faltar a las carreras del domingo de Assen y Alemania. En este último sitio fue donde sufrió cinco caídas con la RC213V, la misma a la que llegó a dedicarle una peineta después de que le dedicara un trallazo en marcha. Ahora, en cambio, en una de sus vueltas rápidas hizo un gesto con la mano derecha, en positivo, mostrando alegría por su mecánica.
Más cosas a destacar de este primer test de la pretemporada 2024, la silla dorada que le colocaron en el box a Bagnaia para honrar la consecución el pasado domingo de su segundo título en MotoGP, un estímulo antes de subirse al nuevo prototipo de 2024, con nuevo motor. Por cierto, que la silla de Márquez también es nueva y se puede leer en ella el mensaje que le da uno de los patrocinadores que le acompañan en esta aventura, Estrella Galicia 0,0: “Levántate y disfruta”.
El otro esperado debut era el de Acosta, que llega a MotoGP de la mano de KTM y lo ha colocado en el GASGAS Factory Racing Tech3 en el que ya empiezan a hablar maravillas de él. El bicampeón tuvo su primera salida de pista, en la curva 1, su primer mini enredo, con Maverick, y se cayó a media hora del final de la sesión, en la curva 2. Acabó 18º a 1.223 de la cabeza, pero que nadie dude que irá a más.
Los diez primeros clasificados fueron Binder, Maverick, Bezzecchi, Márquez, Raúl Fernández, Álex Márquez, Di Giannantonio, Bastianini, Miller y Marini. Más atrás, y Bagnaia 11º, Mir 13º, Augusto Fernández 14º, Martín 15º (sufrió dos caídas sin consecuencias), Acosta 18º, Rins 19º y Aleix 20º. El de Aprilia sólo dio 17 vueltas y se marchó directo a la Dexeus de Barcelona para que le vean esa pierna izquierda, con fisura en el peroné.
La próxima cita para toda la parrilla de MotoGP será del 6 al 8 de febrero en Malasia, aunque antes el novato Acosta y los equipos de pruebas podrán rodar del 1 al 3 en el shakedown que tendrá lugar también en el circuito de Sepang. Hasta entonces, a descansar, que se lo han ganado.