El triplete pasa por el milagro de Martinator
El aspirante llega a 21 puntos del líder a Valencia con 37 puntos en juego y su primer objetivo es conseguir que el Mundial llegue abierto al domingo.
Les diré una cosa, en confianza y permitiéndome la licencia de dirigirme a ustedes directamente... Servidor, tras el bajonazo del domingo de Qatar, y después de hablar con Jorge Martín, con Marc Márquez y con la familia del segundo de la general de MotoGP, a 21 puntos de Francesco Bagnaia, tiene que decir una cosa: ¡Sigo creyendo en el título de Martinator! Aunque todo hay que decirlo, el triplete español de la temporada 2023, con los títulos de Moto2 y Moto3 ya conquistados, por obra y gracia de Acosta y Masiá, la verdad, pasa por un milagro en MotoGP.
Después de que Martín recortara en el esprint de Qatar su desventaja de 14 a 7 puntos, tras tocarle un neumático trasero defectuoso el domingo, sólo pudo ser décimo, mientras que su rival, Francesco Bagnaia, terminaba segundo y volvía a disparar a 21 puntos la diferencia lo que, con 37 ya sólo en juego, hace muy difícil que el español salga campeón. De hecho, el que tiene bola de título en el esprint es Pecco, porque le valdría una victoria suya y un tercero del madrileño de San Sebastián de los Reyes para cerrar el título.
Lo normal es que eso no ocurra porque, si Michelin no vuelve a arruinarle la carrera a Martinator, lo lógico es que esté peleando por la victoria el sábado y ya veremos qué pasará el domingo. Y es que tras el disgusto del domingo pasado en el Prima Pramac, cuando estaban muy frustrados y había hasta quien se sentía robado, ya piensan que esto todavía no está acabado y que, mientras las matemáticas no digan lo contrario, hay que luchar hasta el final y que todo es posible. El ejemplo más ilustrativo es que Rossi le regaló en 2006 el título a Hayden cuando parecía que lo tenía hecho y lo perdió precisamente en Cheste.
Ah, y Valencia, además del desenlace en la pelea por el título, también será la despedida de Marc Márquez de Honda, una historia con mucho más amor que malos ratos en 11 temporadas, pero que en la última ha sido un calvario, por falta de reacción del ala dorada, y que llevará el martes en el test posterior al GP al ocho veces campeón del mundo a un ilusionante debut al manillar de la Ducati del equipo Gresini. ¡Como para perdérselo! Cueste lo que cueste.