Rovanpera y Tanak se juegan el triunfo al sprint en Croacia

Final de infarto. El finlandés y el estonio afrontan la última etapa de la tercera cita de la temporada separados por 19 segundos.

Actualizado a 23 de abril de 2022 19:48 CEST

La recompensa a tres duros días de trabajo se va a jugar al sprint. Kalle Rovanpera y Ott Tanak llegan a la etapa final del Rally de Croacia separados por un suspiro: 19 segundos. El triunfo se decidirá en los cuatro tramos finales en lo que promete será un final de infarto para la tercera cita del Mundial. 54 kilómetros en los que el finlandés y el estonio se van a vaciar a buen seguro para llevarse la victoria.

El paseo militar de Rovanpera en la primera etapa dio paso a un contraataque de Tanak en la segunda. El joven líder del Mundial dejó de abrir pista y pasó a ser el último de los pilotos oficiales que pasaba por los tramos y le pasó factura. Cambió de encontrarse las carreteras limpias a afrontarlas llenas de suciedad sacada por sus antecesores de las cunetas. Y eso que la lluvia no fue tan insistente como el primer día, aunque los tramos estaban llenos de humedades y la niebla también hizo acto de aparición e incluso obligó a cancelar un tramo.

La caravana amanecía con la noticia del ejemplar castigo impuesto a Thierry Neuville por exceder los límites de velocidad en un tramo de enlace. 1.900 euros de multa, dos días de trabajos sociales para él y su copiloto y, lo peor, un minuto de penalización, lo que les llevaba del segundo al cuarto puesto. Ya en el primer tramo era su compañero Oliver Solberg el que sufría una salida de carretera tras la que su coche se incendiaba.

Después comenzó la sangría de segundos cedidos por Rovanpera ante Tanak, que sobre todo le recortó en el tercero del día, en el que el finlandés pinchó. Un imprevisto que permitió al estonio colocarse a su estela y recuperar sus esperanzas de pelear por el triunfo. Por detrás también hay un cerrado duelo por la tercera plaza entre Craig Breen y Neuville, por lo que la corta etapa final promete emociones fuertes.