Todt apuesta por el combustible ecológico y apunta a 2023
El presidente de la FIA habló sobre la incorporación de este tipo de tecnología y del papel que han jugado los motores híbridos en la Fórmula 1.
La Fórmula 1, como la máxima categoría en el mundo del automovilismo que es, se ha caracterizado siempre por estar a la vanguardia e incorporar tecnología vista años después en los coches de calles. Los frenos carbocerámicos, la suspensión activa, las cajas de cambio automáticas accionadas por levas o el sistema de recuperación de energía de frenado (KERS), tuvieron su origen en el Gran Circo para después utilizarse en los vehículos convencionales. Este es un proceso que nunca se detiene y que tiene en la electrificación y en las energías sostenibles su banco de pruebas actual.
El mundo del automóvil se ha visto empujado hacia el mundo eléctrico ante la presión ejercida por las autoridades y sociedades por el imparable avance del cambio climático. La Fórmula 1 no vive ajena a la evolución del automóvil y en 2014 decidió incorporar la tecnología híbrida en sus motores. Sin embargo, aquel cambio trajo un dominio abrumador del equipo Mercedes que ha mermado el espectáculo y los aficionados añoran aquellos tiempos en los que había que taparse las orejas al ver un monoplaza.
El cambio normativo previsto para 2021 y pospuesto a 2022 incluye varias reivindicaciones como el límite de gasto o el cambio en la fisonomía de los coches, pero la electrificación nunca estuvo en juego. De hecho, Jean Todt, presidente de la FIA, ha asegurado en una entrevista con Auto Motor und Sport que la Fórmula 1 no habría sobrevivido sin la tecnología hibrida: "Nuestro deporte es único. Es una pelea máquina contra máquina, hombre contra hombre. Pero la máquina ha cambiado completamente con el paso de los años y el mundo que le rodea también. El cambio climático está en la agenda de todos los gobiernos. Puede que te gusten los motores actuales de la Fórmula 1 o no, pero sin la hibridación no habríamos sobrevivido".
Con las unidades de potencia congeladas, el e-fuel (combustible ecológico) podría ser la próxima gran incorporación tecnológica en el Mundial. El que fuera jefe de equipo de Ferrari apunta a 2023: "Si tenemos éxito en el uso de e-fuels a partir de 2023, también seremos flexibles a la hora de elegir la arquitectura del motor. Entonces también se puede pensar en una unidad menos compleja, siempre que siga siendo eficiente".
Y es que con este tipo de combustible, Volkswagen, en palabras del consejero delegado de la marca, Herbert Diess, estaría interesada en ingresar a una Fórmula 1 neutra en CO2, a lo que Todt no pondría ninguna pega: "Si Herbert Diess ha dicho eso, bienvenido a la Fórmula 1".