Ferrari va a Austria sin mejoras
Binotto confirma que el SF1000 que debutará este fin de semana es el mismo que terminó los test de Barcelona. No habrá novedades hasta Hungría.
Ferrari llevará al GP de Austria el mismo monoplaza que compareció en los test de pretemporada de Barcelona y no se esperan mejoras aerodinámicas hasta la tercera carrera de la temporada, el GP de Hungría. Lo confirma Mattia Binotto en el comunicado del equipo, recalcando que "este fin de semana el coche rodará con la misma configuración que se utilizó al final de los entrenamientos de Barcelona". El motivo es que buscan "un cambio significativo en la dirección del desarrollo, especialmente en la parte delantera". "Habría sido contraproducente seguir esa línea", subraya el ingeniero suizo, máximo responsable de la escudería.
No es un buen síntoma, pero pone de manifiesto una de las máximas de esta temporada: si en unas pocas carreras habrá que congelar especificaciones hasta 2021, debe hacerse con un chasis que ofrezca garantías para dos temporadas. Y el SF1000 que probaron Sebastian Vettel y Charles Leclerc en Montmeló no convence en Maranello. "Sabíamos que no estaríamos delante en Australia y no ha cambiado", sentencia Binotto.
Red Bull Ring acoge el regreso del Mundial tras la crisis del coronavirus con dos carreras consecutivas antes de dirigirse a Hungaroring. Y hay cierta expectación generada alrededor del coche italiano porque sólo han transcendido mensajes negativos relativos a su rendimiento. Es cierto que Ferrari ha optado por el perfil bajo después del golpe de realidad que se llevaron hace un año (fueron los más rápidos en los test pero empezaron la temporada muy lejos de Mercedes), pero el mensaje que trasladan ahora es contundente. Buenas noticias para Mercedes y Red Bull.