MOTOGP I TEST DE PRETEMPORADA

Rabat: "He empezado con sobresaliente en mi reaparición"

“Tras 36 vueltas estaba reventado ya. Lo importante es que no me esperaba encontrarme como me he encontrado”, dice feliz Tito.

Cheste
Mela Chercolés

Felicidad absoluta en el box del Reale Avintia con el regreso de Tito Rabat. Aunque necesita muletas para caminar, empieza a quedar atrás aquella triple fractura en la pierna derecha, cuando en Silverstone, hace casi tres meses, le arrolló la Honda de Morbidelli. Empezó 16º a 1.4 de la cabeza que ocupó Maverick el primer día de test en Valencia, pero encantado con sus sensaciones y las de su nueva moto, la Ducati GP18.

-Para estar con una pierna no está mal.

-Sí, pero antes déjame decirte que tú tampoco has estado mal animándome a la salida del box. Te he guiñado el ojo, ¿lo has visto? (Risas).

-Es que me ha emocionado verle de nuevo en acción tras lo de Silverstone. Parecía ciclismo esto en vez de motos dándole palmas de ánimo. Su reaparición no estuvo nada mal, ¿no?

-Estoy muy contento de cómo he empezado, de quedarme a 1.4 de la cabeza, lo que no es lento ni mucho menos. He estado cogiendo el feeling. Al principio del día tuve inquietud, por los neumáticos, que se enfrían mucho y cuesta calentarlos, y no quería que pasara nada. Me ha dado una sensación muy buena la moto. Me gusta el feeling que me da de delante, lo que gira. Para mí, la 18 es más dulce de conducir que la 17, y de potencia también va bien, aunque no pude acabar de apretar las últimas vueltas por la lluvia. Para mí he empezado con sobresaliente, porque no me esperaba estar como he estado.

-¿Cómo se ha encontrado físicamente?

-Me duele la espalda y los hombros porque, por mucho que entrenes en casa, si no haces MotoGP son músculos diferentes y no llegas nunca hasta intensidad. Después de 36 vueltas estaba reventado ya, pero más que físico es volver a acostumbrarte. Lo importante es que no me esperaba encontrarme como me he encontrado, rodando en 32. Me he sentido cómodo y bien. El plan con los doctores era éste, volver después de la carrera de Cheste. Para soltar las muletas aún hace falta tiempo, porque andar es otra historia y no puedo apoyar todo el peso. Tengo que hacer moto para fortalecer el músculo. Hay que poner la pierna fuerte para febrero, que es lo importante.

-¿Qué diferencias básicas hay entre la Ducati de 2017, con la que ha corrido este año, y la de 2018?

-El feeling de delante y la entrega de potencia, que es muy dulce. No te das cuenta de lo que acelera hasta que ves las demás motos. Te piensas que vas lento y en realidad estás acelerando muchísimo. Esto es un punto buenísimo para hacer buenas carreras y poder estar delante.

-¿Qué valoración hace de cero a cien de su reaparición?

-Un cien, porque no sabía lo que me iba a encontrar. Sólo había rodado con la Panigale, que es una moto de calle y más blando que esto, y otra cosa es una MotoGP, con la que has de hacer el doble de fuerza para frenar, para acelerar, para levantar la moto. Una MotoGP es muy rígida y si me hubiera dolido no podría haber hecho lo que he hecho.

-¿Vuelve a ser muy feliz sintiéndose piloto de nuevo?

-Sí, vuelvo a ser muy feliz, pero además ilusionado porque veo que tengo una buena herramienta y esto lo es todo, porque te hace dar más.

Lo más visto

Más noticias